Los software de pricing intelligence más avanzados como Minderest, permiten comparar no sólo el precio de dos productos, sino también el de sus gastos de envío. Antes de fijarnos únicamente en los números, debemos ahondar más en esta comparativa para determinar si estamos midiendo de forma correcta. Existen varias razones por las cuales sumar directamente al precio del producto los gastos de envío puede ser un gran error, como por ejemplo:
- Distintos tiempos de entrega; 24h vs 72h.
- Distintas compañías con distintas calidades de servicio.
- Servicio de entrega a domicilio vs. recogida en punto de entrega.
- Entrega de producto con recogida del viejo o sin ella (gran electrodoméstico).
- Envío asegurado vs. no asegurado.
Además de estas diferencias importantes, encontramos ciertos tipos de productos que por su naturaleza no son comprados de forma unitaria, como por ejemplo en alimentación, con lo cual no tendría sentido añadir los gastos de envío si desconocemos la cesta final.
Antes de realizar un estudio de pricing con gastos de envío incorporados, deberemos analizar nuestro sector para conocer cómo se comporta nuestro cliente potencial, para posteriormente determinar que gastos de envío son comparables y cuáles no. Una vez realizado el estudio, estaremos en disposición de poder incorporar la gestión de los gastos de envío a nuestra estrategia de pricing.
Descubre cómo Minderest puede impulsar tu negocio.
Contacta con nuestros expertos en pricing para ver la plataforma en acción.